Resumen
La Gerencia Sustentable, fundamentada en la ética y la responsabilidad social, plantea un cambio de enfoque en la gestión, y en la visión sobre el sentido de la empresa como una organización social comprometida con el entorno. Se trata de una tarea compleja direccionada a romper los paradigmas tradicionales, fomentar la cultura ambiental, y enseñar a la colectividad, a pensar diferente, a adquirir un comportamiento digno con el entorno local, y a modelar con el ejemplo.
Palabras claves: Gerencia sustentable, ética, responsabilidad social, compromiso, cultura ambiental.
Introducción
Los lineamientos requeridos para incorporar el desarrollo sustentable en el ámbito gerencial implican valores culturales que consideren un actuar racional, resolver problemas reales, tener la capacidad de autodeterminación para tomar decisiones, valorar la vida de todas las especies del planeta, voluntad para organizar y participar proactivamente en la acción social en lugar de pregonar la sumisión a jerarquías, y pensar en colectivo en un marco de justicia y equidad.
La gerencia sustentable incorpora la idea de que el desarrollo sustentable debe ser asumido como eje transversal del modelo de negocio, valorando sus elementos sociales, midiendo su impacto ambiental y ecológico haciendo rentable su actividad; al mismo tiempo que valora la Ética y la Responsabilidad en una gestión integral que permitirá, no sólo el mantenimiento de la organización en el tiempo, sino entregar valor a la sociedad.
Cambio gerencial frente al cambio climático
El primer paso de una empresa responsable, y no solo utilitaria, es cambiar la gerencia por resultados, y avanzar hacia la Gerencia Sustentable, fundamentada en la ética y la responsabilidad social. Con esto se plantea un cambio de enfoque en la gestión, en la visión sobre el sentido de la empresa, que ya no será vista como una forma de producción en beneficio de un grupo propietario, sino como una organización social comprometida con el entorno.
Aunque la misión principal de las empresas consiste en generar beneficios, éstas pueden al mismo tiempo contribuir al logro de objetivos sociales y medioambientales, concibiendo la responsabilidad social como inversión estratégica en el núcleo de la gestión organizacional. En tal sentido, urge la necesidad de declarar y ejecutar una gestión responsable, y la construcción de una imagen interna y externa, como una condición necesaria para hacer viable sus relaciones con el mercado.
En la actualidad el concepto de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) debe ser adoptado como una condición de sustentabilidad; es decir, el éxito o fracaso de la empresa, su permanencia en los mercados, dependerá de la adopción y práctica efectiva de los principios de la RSE, con el objetivo de promover una cultura que identifique a la empresa y que la mantenga en la dirección de los objetivos definidos.
Los valores y la transparencia constituyen los principios y fundamentos éticos en cada uno de los aspectos operativos de la empresa con una Gerencia Sustentable. Esta transparencia, como ya se acotó, debe ser interna y externa. La transparencia interna se refiere a las finanzas y contabilidad, así como en los procedimientos internos y toma de decisiones en la empresa; mientras que la transparencia externa, se refiere a la forma cómo la empresa maneja con el exterior su información y sus relaciones.
Es frecuente que el concepto de RSE sea asumido, principalmente, en su dimensión externa, es decir, en lo referido al medio ambiente y la comunidad. Muchas empresas caen entonces, en la paradoja de representarse a sí mismas como empresas socialmente responsables, pero no cuentan con políticas relacionadas y efectivamente aplicadas.
Hablar de responsabilidad social empresarial sin hablar de desarrollo sustentable no tiene ningún sentido.
En el entorno se hace cada vez más demandante que la empresa sea sustentable. Por ello la empresa debe partir por ser sustentable internamente para ser sustentable externamente. El concepto de sustentabilidad combina la preocupación por el cuidado del medio ambiente, en cuanto a las condiciones de producción, con un manejo efectivo de la empresa en relación al logro de sus objetivos económicos.
Cambio tecnológico frente al cambio climático
Tal como se apuntó anteriormente, existe la necesidad de cambiar la tecnología para que sea más compatible con el entorno; se trata de adoptar la “tecnología limpia”, la cual se caracteriza por generar menos impacto ambiental en el proceso productivo. Esta tendencia, está logrando, reducciones considerables en los costos de producción, lo que trae como consecuencia que el consumidor pague menor precio por ellos.
Las empresas insertas en la producción más limpia, obtienen beneficios adicionales en la disminución de la generación de desechos y los costos asociados con ellos, optimiza los equipos y procesos, el potencial competitivo de la empresa aumenta, a escala tanto local como internacional, al ganar nichos de mercado entre los clientes conscientes del problema ambiental.
Por otra parte, la industria que asume la prevención de la contaminación, demuestra responsabilidad ambiental empresarial y logra una mejor imagen corporativa de la empresa ante la comunidad; Además, usualmente a las empresas que tienen este modelo de producción, se les aplican deducciones fiscales importantes.
Adquirir tecnología limpia, es un reto para cualquier industria situada en países con economías emergentes, porque implica asumir desafíos representados en nuevos modelos de desarrollo, de producción y mercadeo; así como significa un reto la revisión de su estructura de costos permitiendo eliminar desperdicios.
En este sentido, el sistema Kaizen de mejora continua tiene como uno de sus pilares fundamentales la lucha continua en la eliminación de desperdicios y despilfarros (mudas en japonés).
Sin lugar a dudas que de adoptar la decisión de implantar el Kaizen en la empresa, el primer eje rector, y acciones a realizar, girará en torno a la detección, prevención y eliminación sistemática de los diversos tipos de desperdicios y despilfarros que asolan las organizaciones sean estas públicas o privadas, con o sin fines de lucro.
Un proceso productivo hace uso de materias primas, máquinas, recursos naturales, mano de obra, tecnología, recursos financieros generando como resultado de su combinación productos o servicios.
En cada proceso se agrega valor al producto, y luego se envía al proceso siguiente. Los recursos en cada proceso agregan valor o no lo hacen. El desperdicio o despilfarro implica actividades que no añaden valor económico.
Desperdiciar las capacidades, recursos, e inclusive desperdiciar las oportunidades de generar riqueza, así como también el despilfarro del más importante de todos los recursos: el tiempo, debe ser no sólo tenido muy en cuenta por todos los integrantes de la organización, sino que además debe ser objeto de una política concreta tendiente a su eliminación. No hacerlo impide un mayor nivel para la empresa y sus integrantes, sino que de ello depende también la continuidad de la misma y por tanto de los puestos de trabajo.
Cambio cultural frente al cambio climático
De acuerdo a Deming (1989), en América Latina, la tradición dice que calidad y productividad son incompatibles que no se puede tener ambas, ya que al hacer avanzar la producción se resiente la calidad. Sin embargo, si la misión de una empresa contiene valores humanos y responsabilidad social esto condiciona la productividad de tal forma que productivo es todo aquello que dignifica a la organización e improductivo es todo aquella indigno en la misma.
Toda organización que aplica la administración por calidad atraviesa por seis etapas de cambio estas son:
1. Comprensión: La comprensión comienza en el nivel directivo, con la identificación y comprensión total de los cuatro principios fundamentales de la administración por calidad y termina con la comprensión de todo el personal
2. Compromiso: En el compromiso la organización liderada por la administración establece un compromiso con la calidad y con sus cuatro principios fundamentales
3. Competencia: Para lograr la competencia se define un método o plan en la organización que garantice que todos entienden y tienen oportunidad de participar en el mejoramiento de la calidad
4. Comunicación: La organización debe contar con un plan de comunicación que ayude a documentar y difundir las historias de éxito
5. Corrección: La corrección implica contar con un sistema formal que incluya a todos los departamentos
6. Continuidad: Para garantizar la continuidad se debe dar a la calidad la prioridad número uno entre los aspectos importantes del negocio
Conclusiones
La Gerencia Sustentable es una tarea compleja, comprometida y permanente direccionada a romper los paradigmas tradicionales, fomentar la cultura ambiental, y sensibilizar a la comunidad frente al entorno. Consiste en enseñar a la colectividad, a pensar diferente, adquirir un comportamiento digno con el entorno local, y a modelar con el ejemplo. La Gerencia Sustentable tiene como objetivo insertar en la filosofía de gestión de la empresa, la gestión ambiental como componente vertebral para enfrentar el futuro y mantenerse en la competitividad del mercado con un entorno ambientalmente más saludable.
Asumir esta posición, significa ganar espacios direccionados a educar, gestionar y concientizar al talento humano de la organización frente a los retos ambientales, no solo para desarrollar su mercadeo sino con el objetivo superior de salvaguarda de la vida en planeta.
Por lo tanto materializar la Gerencia Sustentable requiere asumir nuevos desafíos corporativos permitiendo la obtención de tecnologías amigables con el medio ambiente, junto al cumplimiento de buenas prácticas ambientales, para lo cual se requiere la alineación de todos los niveles de la organización hacia el logro de estos objetivos.
No existe algo así como sustentabilidad por partes o fragmentada; por el contrario si existe algún rasgo que define este tipo de gestión es el carácter sistémico de todos los procesos que en ella se involucran. Una vez que las empresas han asumido su responsabilidad ambiental y han desarrollado sus sistemas de gestión, puedan dar un paso más en su aporte al desarrollo sustentable del país, trabajando junto a las comunidades y las organizaciones de la sociedad civil en la redefinición de sus responsabilidades medioambientales frente a la sociedad de cara al futuro.
Referencias bibliográficas
Gobierno de Chile: Responsabilidad social empresarial alcances y potencialidades en materia laboral. Disponible: http://www.dt.gob.cl/1601/articles-88984_recurso_1.pdf
Henríquez, A. (2007). Guía para la empresa Ambientalmente Sustentable. Disponible: http://www.mapeo-rse.info/sites/default/files/Guia_para_la_empresa_ambientalmente_sustentable.pdf
No hay comentarios:
Publicar un comentario